POR DIEGO FERNANDO SANCHEZ VIVAS
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Una sensación de incertidumbre y zozobra, cubre los mercados financieros más importantes del mundo, tras el desplome de una buena parte del sector económico basado en los créditos hipotecarios en los Estados Unidos, lo que generó la caída de entidades bancarias de primer orden, que fundamentaban sus operaciones en ese sector inmobiliario.
La razón de la crisis en esta economía globalizada, es que entidades de todas partes del mundo, en su momento se dedicaron a adquirir indiscrimidadamente en la bolsa, grandes paquetes de esa monumental cartera de créditos hipotecarios con una utilidad aparentemente óptima, pero con una calificación negativa de riesgos.
En una coyuntura favorable dicha inversión sería la ideal, bajas tasas de interés y facilidad en el crédito, endeudamiento masivo y liquidez de dinero circulante, que facilitaría igualmente un consumo masificado y orientaría por su atractivo en ventajas comparativas, la compra a crèdito por el sistema hipotecario de inmuebles con inmensas facilidades de pago y sin mayores garantías para el cubrimiento de los prèstamos. Un excelente negocio bajo circunstancias favorables, pero muy riesgoso si varian o se modifican.
Lo que no contaban los inversionistas y banqueros de las carteras de crèditos hipotecarios, es que por aquellas inexorables reglas cíclicas de la economía, la burbuja hipotecaria empezó a mostrar signos preocupantes de agrietamiento, ante un fenómeno mundial inflacionario, que generó falta de liquidez, lo que derivó en incumplimiento en los crèditos y el colapso de las entidades bancarias que se fundamentaban en la cartera crediticia hipotecaria.
Así las cosas, en los Estados Unidos, el Gobierno y la Reserva Federal han acudido a la ayuda y el auxilio de la Banca, tal como sucedió en Colombia hace algunos años, esperandose en el resto del mundo los efectos y el coletazo de dicha crisis por aquello de la globalización. Al respecto es bueno recordar que en economía, las expectativas de ganancias entre màs altas sean, generan un mayor riesgo de inversión.
ADENDA. Celebramos el rescate y la liberación sano y salvo del médico anestesiólogo Nelson Palechor Obando por parte del Gaula de la Policia Nacional. La inmensa solidaridad en este duro trance, demostrada por la sociedad payanesa y caucana, las autoridades departamentales y municipales, gremios de mèdicos, medios de comunicación y la ciudadanía en general, demuestran su entrega incondicional y dedicación a la misión médica, y lo enaltece como profesional y ser humano de calidades excepcionales.
Fundado en Madrid, en el año 2005. Por Marco Antonio Valencia Calle