Por Leopoldo de Quevedo y Monroy
Acaba de finalizar el 29 Encuentro Internacional de escritores organizado por la Fundación Cultural “Jetón Ferro”en la culta ciudad de los sumercés y los respetos. Más de medio centenar de invitados acudieron a la cita a representar a sus regiones. Una bandada de voceadores de la paz partieron desde Bogotá, cruzando por la vía de Briceño, Villapinzón, Gachancipá, Ventaquemada, Samacá y Tinjacá con sus paisajes enmarcados por el cielo azul con enormes nubes y labrantíos de ruana verde.
Pudimos ver emocionados sembrados de papa, maíz, hortalizas, en rigurosa fila hecha con azadas y sudores sin el apoyo de la tecnología. Nos miraron asombrados sus pinos, eucaliptos, robles, sauces, arrayanes y mortiños. En las eras, junto a la tierra con olor a Boyacá y sabana, nuestros campesinos con pantalón arremangado y su cara ajada por el sol y la inclemencia, se inclinaban para preparar los surcos o a recoger con sus manos generosas los frutos de su siembra y sus cuidados. Vacas y toros pastaban en pequeños grupos en silenciosa charla y las ovejas corrían juguetonas con los vellones blancos teñidos por el polvo del ambiente. Los escritores, entretanto gozaban con apuntes y risas el trayecto y el encuentro.
A las 3.20 de la tarde del día 17, miles de niños con sus ojos y sus timbales esperaban en el Parque Julio Flórez y nos hicieron la corte alrededor para decirnos que esperaban con ansia las palabras de los versos y los cuentos. Reconocimos la ciudad limpia con su Reina en la Basílica y El Pozo de la Renovación. La lluvia también nos saludó y nos llevó en carrera hasta el Club del Comercio, sede del Encuentro. Por la noche la poesía se dio la mano con la música de cuerdas y la gracia de las danzas de Sandra García con la dirección del maestro Jairo Moya. El Hotel Sarabita nos cobijó con sus atenciones y el calor humano para el frío.
Los días siguientes la bandada de sembradores de ilusiones se desperdigó por colegios, pueblos y veredas para distribuir el pan fresco que guardan en sus libros. En el Liceo Nacional José Joaquín Casas, con sus 3.400 pequeños habitantes en las aulas, el colegio Sor Josefa del Castillo, La Normal Nacional, el Comercial Técnico Sagrado Corazón de la ciudad, y en Saboyá, Sutatausa y Samacá se oyeron las voces del viento, de fantasmas y esperanzas que claman por un clima de paz y cese de conflictos.
Colombianos, venezolanos, chilenos, un español, una mexicana y un estadounidense presentaron sus poemas, su voz y sus fantasías al llamado del saleroso dueño y director de la fiesta de la Palabra. Guillermo Quijano, Nicanor Cifuentes, Manolo Boix, Diego Grueso, Juan Carlos Vargas, Gustavo García, José Antonio Vergel, más la risa del mefisto-félico Germán López fueron los grandes animadores del evento. Más de 20 libros tuvieron esta vez su nacimiento en el escenario. Personajes especiales fueron la homenajeada Piedad Bonnet, Clara Elvira Ospina, Fernando Soto Aparicio, Patricia Lara, Guiomar Cuesta Escobar que brillaron con su aura siempre luminosa.
El Encuentro 29 terminó exitoso el domingo 21 con lectura de todos los escritores, las danzas del elenco de Oscar Nieto, las canciones de Diego Ospina y Orlando Berdugo, un vino y la promesa de que la Palabra en Chiquinquirá celebrará el año entrante un estelar trigésimo aniversario.
22-09-08 9:50 a.m.
Acaba de finalizar el 29 Encuentro Internacional de escritores organizado por la Fundación Cultural “Jetón Ferro”en la culta ciudad de los sumercés y los respetos. Más de medio centenar de invitados acudieron a la cita a representar a sus regiones. Una bandada de voceadores de la paz partieron desde Bogotá, cruzando por la vía de Briceño, Villapinzón, Gachancipá, Ventaquemada, Samacá y Tinjacá con sus paisajes enmarcados por el cielo azul con enormes nubes y labrantíos de ruana verde.
Pudimos ver emocionados sembrados de papa, maíz, hortalizas, en rigurosa fila hecha con azadas y sudores sin el apoyo de la tecnología. Nos miraron asombrados sus pinos, eucaliptos, robles, sauces, arrayanes y mortiños. En las eras, junto a la tierra con olor a Boyacá y sabana, nuestros campesinos con pantalón arremangado y su cara ajada por el sol y la inclemencia, se inclinaban para preparar los surcos o a recoger con sus manos generosas los frutos de su siembra y sus cuidados. Vacas y toros pastaban en pequeños grupos en silenciosa charla y las ovejas corrían juguetonas con los vellones blancos teñidos por el polvo del ambiente. Los escritores, entretanto gozaban con apuntes y risas el trayecto y el encuentro.
A las 3.20 de la tarde del día 17, miles de niños con sus ojos y sus timbales esperaban en el Parque Julio Flórez y nos hicieron la corte alrededor para decirnos que esperaban con ansia las palabras de los versos y los cuentos. Reconocimos la ciudad limpia con su Reina en la Basílica y El Pozo de la Renovación. La lluvia también nos saludó y nos llevó en carrera hasta el Club del Comercio, sede del Encuentro. Por la noche la poesía se dio la mano con la música de cuerdas y la gracia de las danzas de Sandra García con la dirección del maestro Jairo Moya. El Hotel Sarabita nos cobijó con sus atenciones y el calor humano para el frío.
Los días siguientes la bandada de sembradores de ilusiones se desperdigó por colegios, pueblos y veredas para distribuir el pan fresco que guardan en sus libros. En el Liceo Nacional José Joaquín Casas, con sus 3.400 pequeños habitantes en las aulas, el colegio Sor Josefa del Castillo, La Normal Nacional, el Comercial Técnico Sagrado Corazón de la ciudad, y en Saboyá, Sutatausa y Samacá se oyeron las voces del viento, de fantasmas y esperanzas que claman por un clima de paz y cese de conflictos.
Colombianos, venezolanos, chilenos, un español, una mexicana y un estadounidense presentaron sus poemas, su voz y sus fantasías al llamado del saleroso dueño y director de la fiesta de la Palabra. Guillermo Quijano, Nicanor Cifuentes, Manolo Boix, Diego Grueso, Juan Carlos Vargas, Gustavo García, José Antonio Vergel, más la risa del mefisto-félico Germán López fueron los grandes animadores del evento. Más de 20 libros tuvieron esta vez su nacimiento en el escenario. Personajes especiales fueron la homenajeada Piedad Bonnet, Clara Elvira Ospina, Fernando Soto Aparicio, Patricia Lara, Guiomar Cuesta Escobar que brillaron con su aura siempre luminosa.
El Encuentro 29 terminó exitoso el domingo 21 con lectura de todos los escritores, las danzas del elenco de Oscar Nieto, las canciones de Diego Ospina y Orlando Berdugo, un vino y la promesa de que la Palabra en Chiquinquirá celebrará el año entrante un estelar trigésimo aniversario.
22-09-08 9:50 a.m.
1 comentario:
Hola cómo estan? Quisiera saber si ya hay una lista previa (programación) del XXXI Encuentro internacional de escritores en Chiquinquirá. El encuentro pasado fue bueno ya que contó con la particpación de nuevos escritores, algunos de ellos jóvenes (Jhonathan Sánchez, Gustavo Adolfo García, Sebastián Martínez, entre otros). Considero que los escritores jóvenes y los ya legítimados pueden ser una buena combinación ya que incentiva a niños jóvenes y adultos a participar en este encuentro. Lo sé porque algunos amigos y yo queremos tener de nuevo a los escritores ya mencionados...
Gracias por este espacio dedicado a la Poesía, al Arte y la Literatura.
Gracias a la fundación Jetón Ferro.
Publicar un comentario