Indignación sobre actos en el Cauca hoy
Esa humillación a que el gobierno nacional ha permitido infringir a nuestro ejercito de no tiene antecedentes en la historia de Colombia.
Desarmar a un soldado e irrespetarlo era una afrenta a la nacion. Ahora el temor a que las encuestas sigan bajando consciente que se humille a los saldados, se los atropelle, se los arrastre, se los desaloje y que sus armas sean una burla.
Nada justifica este afrentoso atropello y nada explica la posición dubitativa y blandengue del gobierno.
Las farc deben estar felices y la justicia en mora de encausar a los indígenas por el delito de sedición que han cometido como grupo y por lesiones individualmente.
Que irrespeto. Si a un soldado le puede pasar eso, ciudadanos pongamos la barba en remojo.