DE QUIJOTES Y BURÓCRATAS

Por: Marco Antonio Valencia
www.popayancity.blogspot.com

No parece, pero hay Quijotes en este pueblo.
Gente que sin la ayuda de esa larga lista de burócratas sin imaginación que tenemos, son capaces de hacer proezas para la historia y la vergüenza del Estado (incapaz).
Para ejemplo, durante diez años, hemos tenido encuentros de narración oral con funciones gratuitas. Espacios donde se dicen verdades de manera grotesca (porque no hay otra manera, como aquí) y mentiras tan dulces y risibles, como la hipocresía que se ve, en los saludos de “algunos polítiqueros”. Me refiero al grupo de narradores orales que se hacen llamar “Encuentate-titotu”, y que sin venderle el alma al diablo, con públicos envidiables, andan haciendo reír por barrios y universidades, pasándola bien, y gozándose su destino en esta ciudad (que huele a rancio de extraños cada vez más). Eso es hacer patria. Trabajar por la cultura sin pedirle permiso a nadie. Atendiendo la vocación, las necesidades del alma, y sin estar esperando la benevolencia de los burócratas de turno, que como emperadorcitos, creen que tenemos que (…) para obtener un servicio, o el apoyo del Estado que representan.

Me refiero también, al cine club la Tuatara, que cada miércoles presentan películas con entrada gratuita en el auditorio del ITC desde hace casi diez años. Gente que sin mercantilismos, ni dejándose seducir por el cine barato de los gringos, trabajan por la formación de públicos en estética y cinefilia. Eso es hacer patria, esa es la gente que necesitamos poner como ejemplo para los cambios culturales de la región.

Me refiero a Wipala, una tienda-café “de arte con identidad”, donde un grupo de artistas entusiasmados por difundir objetos trabajados a mano, nos resuelven el problema del consumismo costoso y dañino, al que nos arrastran los hipermercados y las modas.

Y así, si pones los ojos en el cuadrante correcto del espejo que significa esta ciudad de mantequilla batida, te vas dando cuenta que aquí no se mueren los quijotes, que aquí nacen Quijotes todos los días. Que por donde vas, hay gente con ideas, sueños e ideales para construir patria y para hacer cosas bonitas por la región; pero que lastimosamente, nuestros gobernantes que poco o nada saben de cultura, demuestran sus torpezas mayores nombrando a funcionarios sin molleja para asuntos culturales. Que tristeza (…), pero más tristeza es que uno, esperanzado en los huevos del murciélago, haya creído que ahora, con estos gobernantes si, pero resulta que no. Que tampoco.