Fabio Arévalo Rosero MD*
El ejercicio frecuente del ciclismo es un caso especial y necesario ha ser tenido en cuenta para minimizar los riesgos que pueda conllevar. Mientras se practique con los cuidados necesarios tiene abundantes ventajas para todos los aficionados. No obstante es importante informar de los cuidados que es necesario tener en cuenta, recomendaciones que se derivan de investigaciones serias que se realizan en el campo de las ciencias de la actividad física.
Hoy le damos atención a un caso particular. Relaciona al ciclismo con posibilidades de alteración sexual o impotencia en los hombres ciclistas que no toman las medidas adecuadas con el uso del sillín. Igualmente con el manejo de algunos accesosrios específicos como los uniformes. Según estudios realizados por los investigadores Desai y Solomon (Efectos del ciclismo de larga distancia- Ciclismo e impotencia), el ciclismo tiene relación con lesión peneana y, en algunos casos, con disfunción eréctil a corto plazo. Según sus resultados el asiento de la bicicleta reduce la irrigación hacia el pene por una presión sostenida y comprime los nervios pudendos contra el pubis.
También demuestran que el riesgo de accidente y lesión genital, es más alto que en otros deportes con traumatismos directos que afectan la actividad y la higiene sexual. Así mismo el uso sostenido de uniformes sintéticos apretados contribuye a incrementar la presión y la temperatura, lo cual favorece la lesión sexual masculina y la infertilidad. Los testículos se afectan en forma directa por el trauma repetido, la compresión y el aumento de la temperatura. Se cree que la mayoría de ciclistas que puedan estar afectados no manifiestan ni consultan su problema por temores equivocados.
Otro estudio llevado a cabo en los Estados Unidos parece estar dando la razón a éstas teorías. Se trata de una investigación llevada a cabo con varios policías ciclistas en California, quienes se quejaron de sensaciones de entumecimiento y experimentar ciertas disfunciones eréctiles. Es importante señalar que los ciclistas evaluados pasaban seis o más horas sobre sus bicicletas, por lo que estos descubrimientos no tendrían aplicación a quienes usan la bicicleta de forma menos intensiva. De todos modos, el estudio citado demostró que el 93 por ciento de estos policías ciclistas señalaron que tenían una sensación de entumecimiento en sus genitales.
Asimismo, el 27 por ciento de ellos tenían erecciones durante el sueño, lo cual era sensiblemente menor al compararlo con el 43 por ciento de los no-policías que las experimentaban. Algunos médicos señalan que la impotencia en los ciclistas es cuatro veces mayor que en los demás hombres, pero lo cierto es que no había ninguna prueba científica concluyente que avale estos datos. Pero también existen medios preventivos y medidas lógicas para no asustarse con la buena práctica del ciclismo. fabio121@gmail.com
*Especialista en ciencia deportiva