Nuevos gobiernos……. y que le espera a nuestra región?
Dicen que después de la tormenta viene la calma y nuestra ciudad acaba de superar una gran tormenta electoral, fenómeno extraño que modifica de manera radical pero transitoria el comportamiento de las comunidades y de aspirantes a cargos de elección popular, lamentablemente esto no cambia nuestra realidad.
Durante este corto pero intenso periodo, muchos de los supuestos candidatos, se dedicaron a atacar a sus contendores, algunos con el pensamiento y la construcción de ideas para la gente y otros con estrategias dignas de su forma de ser, pensar y ver las cosas, de esta manera, hubo ganadores como perdedores, derrotados y triunfadores.
Se consideran entonces “ganadores” a los que alcanzaron el objetivo propuesto y de manera eficaz (al precio que fuera), “perdedores” aquellos que invirtieron mucho dinero pero aquello no se reflejó en las urnas, “derrotados” como aquellos caciques que se confabularon en contra de la voluntad de un pueblo, anteponiendo sus intereses personales y terminaron recibiendo un merecido desprecio popular y “triunfadores” a aquellos que a pesar de no contar con una maquinaria o el apoyo económico y un padrino con credencial, gozan del respeto, la admiración y el reconocimiento general de la gente gracias a que hicieron las cosas bien, de la mano con la comunidad y ahora se proyectan como el liderazgo renovador que necesita el Cauca.
La contienda estuvo pasada por una intensa actividad escudriñadora, que se encargó de sacar a la luz pública hasta el más mínimo detalle del pasado político y hasta familiar de muchos, pero ellos lucharon incansablemente por tratar de mostrar que eran la mejor opción, ahora el reto es demostrarlo y ¿cómo van a hacer nuestros nuevos gobernantes para mirar el futuro?
Es muy fácil, deben mirar más allá de las regalías, y observar como lo hacen las regiones con mayor éxito en el campo nacional e internacional, procurando reducir la pobreza y mejorando el bienestar de toda su gente, porque el panorama es claro y nuestros senadores y representantes no continuarán, gracias a su falta de compromiso con la gente.
¿Pero dónde está la clave?
Inicialmente los gabinetes deben estar conformados por personas y profesionales realmente competentes y algo muy importante, se le debe apuntar a la educación y al emprendimiento como la mejor estrategia para salir de la pobreza, ya que con un TLC y la posible apertura económica que este acuerdo implica, si continuamos con la misma calidad educativa y no la mejoramos en los sectores marginados de la sociedad, acompañada de un programa de oportunidades para generar progreso como el emprendimiento, los Caucanos y Payaneses que viven en la pobreza y que son bastantes, no van a salir nunca de vender productos en las calles y ejercer el mototaxismo como actividad de sustento.
Así crezca la economía y lleguen nuevos inversionistas, el gran programa de lucha contra la pobreza se llama educación y todo porque el mundo ha cambiado y mientras en los años 60, las materias primas marcaban la pauta, en este momento son los nuevos productos y servicios, frutos que se obtienen pensando en torno a la innovación, al emprendimiento pero basados en una educación de calidad atemperada a la realidad mundial.
Dicen que después de la tormenta viene la calma y nuestra ciudad acaba de superar una gran tormenta electoral, fenómeno extraño que modifica de manera radical pero transitoria el comportamiento de las comunidades y de aspirantes a cargos de elección popular, lamentablemente esto no cambia nuestra realidad.
Durante este corto pero intenso periodo, muchos de los supuestos candidatos, se dedicaron a atacar a sus contendores, algunos con el pensamiento y la construcción de ideas para la gente y otros con estrategias dignas de su forma de ser, pensar y ver las cosas, de esta manera, hubo ganadores como perdedores, derrotados y triunfadores.
Se consideran entonces “ganadores” a los que alcanzaron el objetivo propuesto y de manera eficaz (al precio que fuera), “perdedores” aquellos que invirtieron mucho dinero pero aquello no se reflejó en las urnas, “derrotados” como aquellos caciques que se confabularon en contra de la voluntad de un pueblo, anteponiendo sus intereses personales y terminaron recibiendo un merecido desprecio popular y “triunfadores” a aquellos que a pesar de no contar con una maquinaria o el apoyo económico y un padrino con credencial, gozan del respeto, la admiración y el reconocimiento general de la gente gracias a que hicieron las cosas bien, de la mano con la comunidad y ahora se proyectan como el liderazgo renovador que necesita el Cauca.
La contienda estuvo pasada por una intensa actividad escudriñadora, que se encargó de sacar a la luz pública hasta el más mínimo detalle del pasado político y hasta familiar de muchos, pero ellos lucharon incansablemente por tratar de mostrar que eran la mejor opción, ahora el reto es demostrarlo y ¿cómo van a hacer nuestros nuevos gobernantes para mirar el futuro?
Es muy fácil, deben mirar más allá de las regalías, y observar como lo hacen las regiones con mayor éxito en el campo nacional e internacional, procurando reducir la pobreza y mejorando el bienestar de toda su gente, porque el panorama es claro y nuestros senadores y representantes no continuarán, gracias a su falta de compromiso con la gente.
¿Pero dónde está la clave?
Inicialmente los gabinetes deben estar conformados por personas y profesionales realmente competentes y algo muy importante, se le debe apuntar a la educación y al emprendimiento como la mejor estrategia para salir de la pobreza, ya que con un TLC y la posible apertura económica que este acuerdo implica, si continuamos con la misma calidad educativa y no la mejoramos en los sectores marginados de la sociedad, acompañada de un programa de oportunidades para generar progreso como el emprendimiento, los Caucanos y Payaneses que viven en la pobreza y que son bastantes, no van a salir nunca de vender productos en las calles y ejercer el mototaxismo como actividad de sustento.
Así crezca la economía y lleguen nuevos inversionistas, el gran programa de lucha contra la pobreza se llama educación y todo porque el mundo ha cambiado y mientras en los años 60, las materias primas marcaban la pauta, en este momento son los nuevos productos y servicios, frutos que se obtienen pensando en torno a la innovación, al emprendimiento pero basados en una educación de calidad atemperada a la realidad mundial.
Jhan Alejandro Sandoval. Mg. Sci.
Presidente Fundación Ecoambiental de Colombia