DE LA NOCHE DE BRUJAS
MARCO ANTONIO VALENCIA CALLE
La gente inventa más poder y más historia sobre
las brujas de lo que fueron o son. Para muchos, las brujas son adoradoras del
diablo con el cual tenían relaciones sexuales y se dedicaban a la preparación de
afrodisíacos y maleficios. Para otros, fueron un invento de la iglesia y de la
justicia para subliminar los levantamientos populares y someter a los rebeldes.
La brujería ha sido motivo de histeria
colectiva para trabajar desde siquiatras y sicólogos; pretexto laboral para explicaciones
de antropólogos; punto de partida para artistas donde se han inventado todo tipo de falacias a
su alrededor.
Y ahora último, en varios países, los 31 de octubre
de cada año, son “un negocio” donde los dulces incrementan sus ventas en un 70%,
se disfrazan a los niños para la foto en fiestas con comilonas, y los adultos
encuentran pretexto para embriagarse en discotecas y bares… por ser día de
brujas. Un día de asueto, de ocio y de fiesta. Un rito social para jugar a ser
otros disfrazados de lo que no somos por arte de magia, con el hechizo de la
alegría pro vivir.